martes, octubre 30, 2007

MENSAJE AL PUEBLO PANAMEÑO

MENSAJE AL PUEBLO PANAMEÑO
 
Es del conocimiento de la opinión pública que, sobre mi persona, se ha abierto un expediente judicial totalmente amañado y espurio.
 
A raíz de los asesinatos de los compañeros Osvaldo Lorenzo y Luiyi Argüelles, acusamos de frente a empresarios inescrupulosos y a las autoridades de fomentar el Sicariato y el sindicalismo amarillo como forma de enfrentar al sindicalismo verdaderamente clasista y beligerante.  Con ello, los enemigos del pueblo, buscan desconocer y violar derechos y conquistas alcanzados por los trabajadores de la construcción a en nuestra larga historia de reconocidas luchas y sacrificios.
 
El Gobierno de Martín Torrijos y el PRD concibió que desatando el terrorismo judicial contra mi persona y compañeros de lucha podría aplacar estas denuncias.  Para ello hizo uso de las viejas prácticas norieguistas, montando un show de lo más absurdo con maleantes de poca monta quienes me formularon acusaciones ridículas e infundadas, como parte de un guión previamente escrito por asesores presidenciales, mismos que en su momento también sirvieron a Manuel Antonio Noriega.
 
Lo alarmante de todos estos hechos es que el Ministerio Público, particularmente el Fiscal Auxiliar de la República, Luis Manuel Martínez, encontró en esta grotesca trama mérito para emprender una cacería y ordenar mi detención, la cual fue impedida por recurso presentado por mi defensa ante la Corte Suprema de Justicia.
 
No obstante, se me impuso medida cautelar, se me otorgó país por cárcel, se me prohíbe la salida del país lo que me impide cumplir con compromisos sindicales y se obliga a notificarme dos veces por mes ante las autoridades judiciales.
 
A más de dos meses del inicio de este bochornoso proceso judicial, la situación no ha variado.  La Fiscalía no ha practicado las pruebas solicitadas por mi defensa.  Es claro en el expediente la serie de incongruencias y contradicciones del supuesto acusador, que estuvo eludiendo las citaciones de la Fiscalía y que ha reconocido tener un vasto prontuario delictivo y haberse paseado por todas las cárceles del país.
 
Pero a pesar de ello siguen las medidas contra mi persona y lo que es peor, que los asesinos de Osvaldo Lorenzo y Luiyi Argüelles siguen libres, incluido los autores intelectuales y materiales de estos crímenes.  Nos referimos, entre otros, a Aniano Pinzón, el sargento Manuel Moreno y Rogelio Ramos, alias "Juana Peña".
 
Debo señalar que no abrigamos esperanza alguna de justicia en autoridades que, por ejemplo, se han mostrado incapaces de actuar frente a las acciones delictivas de agentes de la Policía Nacional y otros estamentos de seguridad, que intentaron ocultar el arma con que se ultimó a Luiyi Argüelles como lo comprueban las vistas del noticiero de Telemetro Reporta; o que nada hicieron frente al asesinato en su presencia de Osvaldo Lorenzo; o como ha sucedido con los casos de violación en que se han visto envueltos unidades de la Policía; la salvaje agresión de miembros del SPI contra pacientes y familiares de las víctimas por dietilenglycol; o más recientemente en el asesinato de la empresaria García Eleta a todas luces víctima de la imprudencia y falta de pericia y profesionalismo de agentes del SPI quienes también, como ocurrió con el crimen de Luiyi Argüelles, decidieron ocultar el arma homicida.
 
Son estas mismas autoridades las que permitieron, a pesar de las querellas presentadas por FRENADESO, lo que denominamos el robo del siglo, es decir la exoneración de casi 400 millones de dólares de la venta de Banco del Istmo al HSBC; o que nada hicieron frente a la Estafa de la Ampliación del Canal comprobada en las 80 actas de la Junta Directiva de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) aportadas por FRENADESO; y en otros sonados casos de corrupción en que se han visto envueltos políticos, empresarios y funcionarios corruptos.
 
Estos hechos comprueban que seguimos viviendo en un país controlado por la MAFIOCRACIA, que ha impuesto un reino de impunidad que protege a los ladrones de cuello blanco, desata la persecución contra los dirigentes populares, que se apresta a penalizar la protesta social y desencadenar la represión indiscriminada contra los sectores en lucha, como lo demuestra la salvaje agresión que sufrieron el pueblo de Madugandi, los moradores de El Toro en Burunga; los trabajadores, estudiantes y pueblo en general en Chiriquí.
 
Reiteramos al pueblo que seguiremos denunciando esta patraña bochornosa que representa la causa abierta contra mi persona y responsabilizamos a Martín Torrijos, a su Gobierno, a la Fiscalía Auxiliar y al Ministerio Público de cualquier situación que atente contra la integridad física de mis familiares, compañeros y la mía propia.
 
Nada ni nadie logrará apartarnos del camino que hemos elegido para luchar en pro del bienestar de la clase trabajadora y de nuestro pueblo.
 
Patrióticamente,
 
Saúl Méndez R.



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